El coro de la Real Iglesia de San Pablo va a ser sometido a una intervención arquitectónica, debido a que en esta zona, caracterizada por sus nervaduras góticas, han aparecido grietas y se teme por su estabilidad, por lo que los Misioneros Claretianos, propietarios de la Real Iglesia de San Pablo, han decidido acometer esta actuación para terminar con el peligro existente.
De momento, no se sabe ni la duración ni la importancia de la intervención, ya que previamente se va a realizar un diagnóstico, pero sí es seguro que la puerta principal, que da a la calle Capitulares, va a permanecer cerrada durante varios meses, debido a que el coro está situado en la cabecera de la iglesia.
El culto en San Pablo no se va a interrumpir. Por su parte, la Hermandad de la Expiración, cuya Capilla donde se venera a sus Titulares está situada junto a la zona afectada que estará apuntalada siendo imposible el acceso a este espacio, va a tener que trasladar a sus Titulares a la Capilla de San José, anexa a la nave del Evangelio (A pocos metros de la Capilla de Las Angustias). Allí, los Titulares de La Expiración permanecerán el tiempo que duren las obras.
La Hermandad de las Angustias dio traslado hace más de un mes al Obispado de Córdoba del informe completo, elaborado por el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH), que indicaba que el estado del templo no es el más optimo para la conservación del grupo escultórico, junto a una carta en la que se solicitaba permiso para buscar un lugar más adecuado, para garantizar la conservación de unas imágenes de un valor artístico muy alto. La autoridad diocesana todavía no se ha pronunciado en ningún sentido sobre este asunto.
Ambas Hermandades de Penitencia no ocultan su preocupación pero confían en que las obras terminen pronto, ya que, de no finalizar antes de la próxima Semana Santa, supondría un grave contratiempo para las cofradías de La Expiración y Las Angustias, que verían cómo no tienen puerta de salida, debido a que las dimensiones de la que da a la calle San Pablo son muy pequeñas.
Por último, la Hermandad del Rocío de Córdoba no se verá demasiado afectada, de momento, por las obras que se llevarán a cabo en el interior del templo.
De momento, no se sabe ni la duración ni la importancia de la intervención, ya que previamente se va a realizar un diagnóstico, pero sí es seguro que la puerta principal, que da a la calle Capitulares, va a permanecer cerrada durante varios meses, debido a que el coro está situado en la cabecera de la iglesia.
El culto en San Pablo no se va a interrumpir. Por su parte, la Hermandad de la Expiración, cuya Capilla donde se venera a sus Titulares está situada junto a la zona afectada que estará apuntalada siendo imposible el acceso a este espacio, va a tener que trasladar a sus Titulares a la Capilla de San José, anexa a la nave del Evangelio (A pocos metros de la Capilla de Las Angustias). Allí, los Titulares de La Expiración permanecerán el tiempo que duren las obras.
La Hermandad de las Angustias dio traslado hace más de un mes al Obispado de Córdoba del informe completo, elaborado por el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH), que indicaba que el estado del templo no es el más optimo para la conservación del grupo escultórico, junto a una carta en la que se solicitaba permiso para buscar un lugar más adecuado, para garantizar la conservación de unas imágenes de un valor artístico muy alto. La autoridad diocesana todavía no se ha pronunciado en ningún sentido sobre este asunto.
Ambas Hermandades de Penitencia no ocultan su preocupación pero confían en que las obras terminen pronto, ya que, de no finalizar antes de la próxima Semana Santa, supondría un grave contratiempo para las cofradías de La Expiración y Las Angustias, que verían cómo no tienen puerta de salida, debido a que las dimensiones de la que da a la calle San Pablo son muy pequeñas.
Por último, la Hermandad del Rocío de Córdoba no se verá demasiado afectada, de momento, por las obras que se llevarán a cabo en el interior del templo.
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