-LA VIRGEN DE LAS LÁGRIMAS VOLVERÁ EL SÁBADO A SANTA MARTA.

Misericordia celebra así el 25 aniversario de su llegada al convento, donde estuvo 13 años.

Casi una generación de cofrades cordobeses conoció al Cristo de la Misericordia y a la Virgen de las Lágrimas no en San Pedro, su casa de siempre, sino en el convento de Santa Marta, donde la hermandad residió trece años por el cierre de la hoy basílica, entre 1985 y 1998. Para celebrar las bodas de plata de su llegada al monasterio de religiosas jerónimas, la cofradía del Miércoles Santo llevará a su titular mariana, Nuestra Señora de las Lágrimas en su Desamparo, a la que fue su sede el próximo sábado 2 de octubre, donde presidirá una función conmemorativa, tras la que volverá a San Pedro.

La corporación ha invitado a sus hermanos, niños y mayores, a que participen en el cortejo acompañando a la Virgen, que saldrá de la basílica a las 18.00 horas sobre una parihuela y acompañada por música de capilla. El cortejo, abierto por la tradicional cruz de Soledad, seguirá por Juan de Mesa, plaza de la Almagra, Cedaceros, Juramento, Pedro López, Huerto de San Pablo, Orive, San Pablo y Santa Marta para entrar a las 19.00 horas a la iglesia de la que salió por última vez, junto al Cristo de la Misericordia, el Viernes de Dolores de 1998. Media hora más tarde será la misa, en la que actuará un cuarteto de cuerda.

A su término la cofradía emprenderá el camino de regreso, que comenzará a las 20.45 y seguirá por Villalones, Fernán Pérez de Oliva, Gutiérrez de los Ríos, plaza de la Almagra y Juan de Mesa. La entrada en San Pedro está prevista para las 21.45.

La estancia en Santa Marta y el cariñoso trato de las madres jerónimas dejó una honda huella en la hermandad de la Misericordia, que en aquellos años debía salir de la Catedral. «Pasado este cuarto de siglo, ha llegado la hora de agradecer de alguna manera aquellas atenciones y la vinculación que se materializó con la admisión de la comunidad en la nómina de la hermandad y en la concesión de la Carta de Hermandad que nos vincula a la orden de San Jerónimo», afirmó el hermano mayor, Manuel Ramírez, que resaltó que la celebración no tendría sentido «sin la presencia de los cofrades de la Misericordia».

Fuente: El ABC de Córdoba.

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