Consideran que no puede aplicarse los mismos criterios que en los pasados años de bonanza. La programación de la entidad está condicionada por las ayudas, especialmente la de Cajasur. Las cofradías se van a ajustar más aún el cinturón debido a la crisis y, de hecho, ya se trabaja para redactar una propuesta de cuentas más austera que la de los últimos años. Esta es la situación después del acuerdo al que se llegó en la última asamblea de hermanos mayores de la Agrupación de Cofradías de Córdoba, en la que se dejó encima de la mesa hasta septiembre la propuesta original de presupuestos, que ni se llegaron a leer, ya que, como la propia mesa de la asamblea reconoció, las cuentas del 2011 se basaban en los criterios y principios que han venido imperando en los últimos años, pero que quizás ahora no se ajusten a la realidad, informaron ayer distintos hermanos mayores participantes en la asamblea y el propio presidente de la Agrupación, Juan Bautista Villalba. La nueva redacción de los presupuesto no solo responde a una filosofía de solidaridad con la sociedad y las instituciones en estos tiempos de crisis, sino también a "la necesidad de ajustarnos a una realidad", además de adaptarse a causas que ya en septiembre estarían más claras, como "las ayudas", explicó Juan Bautista Villalba. CAJASUR, FACTOR VITAL Aunque el presidente de la Agrupación de Cofradías no citó expresamente a Cajasur, a nadie se le oculta que la subvención anual que hasta ahora ha venido otorgando la obra social (en metálico, con la cesión de instalaciones o en especies) de esta caja condiciona toda la actividad anual de la Agrupación, por lo que habrá que esperar a que se sepa esta semana el destino de la entidad financiera y la filosofía que aplicará. De hecho, "los nuevos presupuestos no tienen siquiera que ser menores que los del año pasado si se obtienen las ayudas habituales", matizó Villalba. El presidente de la Agrupación, además, también confía en que otras ayudas, como la del Ayuntamiento, no mermen en el 2011, algo que sí temen otras reconocidas entidades ciudadanas cordobesas, entre ellas la Federación de Asociaciones Vecinales Al-Zahara. En todo caso, "la idea que manifestamos nosotros y que era la de todos los asistentes era reducir gastos en lo posible, de acuerdo a los tiempos que corren", explicó ayer el hermano mayor de la hermandad del Vía Crucis, Santiago Góngora (una de las voces que primero se pronunciaron en la asamblea sobre este punto), y que reconoció la voluntad de consenso de la mesa de la asamblea. Capítulo aparte es la obra social que tiene la Agrupación de Cofradías y que este año ha supuesto una importante cantidad de sus presupuestos, 50.000 euros, con iniciativas como el convenio con Cáritas para el hogar residencia San Pablo o destinar la recaudación del concierto extraordinario de Cuaresma y la del pregón de Semana Santa a obras benéficas. Según Villalba, esta partida es la más sensible de los nuevos presupuestos a presentar en septiembre y "no hay ninguna intención de tocarla", aunque reconoció que "todo está condicionado a los ingresos". Hay que recordar también que las hermandades cordobesas, y aunque existen enormes diferencias entre las cuentas y actividades de unas y otras, han reducido en líneas generales sus presupuestos este año debido a un sensible descenso de ingresos. Pese a todo, las hermandades destinaron el pasado año 330.000 euros a obras sociales. Diario Córdoba.
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